Recupera tu energía de una vez por todas!
¿Te sientes cansado/a y sientes que tu energía ha ido desgastándose poco a poco?. Los problemas de energía son un síntoma recurrente cuando nos enfrentamos a periodos de estrés y problemas emocionales. Todos pasamos por épocas en las que vemos que nuestros niveles de energía se ven afectados y observamos que no podemos rendir a los niveles que nos gustaría.
Sin embargo, la gran actividad, las exigencias laborales y la alta complejidad de nuestro entorno actual hacen que mantener un nivel correcto de energía se convierta en un aliado clave.
Hoy en Holamente te explicamos 10 acciones efectivas para que vuelvas a recuperar tus niveles de energía!
¿Cómo conseguimos tener más energía?
Un descenso en nuestros niveles de energía puede ser el resultado de un gran número de factores como una dieta inadecuada o desregulaciones hormonales, no obstante , la mala gestión de nuestros pensamientos y emociones puede llegar a jugar un papel trascendental en el consumo de energía inadecuado. Si tienes una baja energía, revisa estos pasos!
1) Practica mindfulness: el mindfulness nos ayudará tanto física como psicológicamente. ¿Sabías que el mindfulness es una de las prácticas con una mayor evidencia científica?. La meditación mejorará nuestros niveles de oxigenación y bajará nuestros niveles de cortisol (hormona del estrés), además nos ayudará a mejorar nuestra capacidad de concentración y subirá nuestros niveles de energía. Si tu intención es iniciarte en el mindfulness, recomendamos practicarlo al menos 10 minutos cada 2 días. Si quieres saber cómo, visita este artículo!
2) Organiza tus pensamientos: uno de los grandes consumidores de nuestra energía será la desorganización de nuestros pensamientos. No saber qué hacemos y tener la sensación de que hacemos las cosas sin orden ni sentido puede llegar a consumir nuestra energía. ¿Has notado alguna vez que sientes que no estás haciendo las cosas bien pero que no sabes por dónde tienes que empezar a para organizarte y hacerlas correctamente? Es hora de hacer un enunciado de misión personal!
3) Realiza ejercicio: pese a que parezca contradictorio, el ejercicio puede ser una fuente energía si lo realizamos de forma correcta. Con un ejercicio exigente pero de intensidad moderada (no exhaustiva), conseguiremos mejorar nuestros niveles de oxigenación, regulación hormonal y metabolismo, sintiéndonos mucho más enérgicos y saludables. Además el deporte puede ayudarnos a mejorar nuestra capacidad de atención y autoconfianza.
4) Prioriza tu descanso: descansar indebidamente puede disminuir nuestros niveles de ATP (sustancia que sirve de aporte energético en nuestras reacciones químicas) además de no reparar el gasto energético realizado día anterior. No descansar de forma debida empeorará nuestra inestabilidad emocional y perjudicará a nuestro desarrollo cognitivo. No descansar no solo hará que tengas una menor energía, sino que también hará que tengas que gastar más energía de lo normal en gestionar las situaciones emocionales y cognitivas de una forma correcta ya que te requerirán una mayor atención.
Artículo recomendado: Eliminar tu insomnio en 9 pasos.
5) Cuida de tus niveles de estrés: durante un periodo de estrés nuestro cuerpo bajará nuestras defensas y gastará un extra de energía. Recordemos que el estrés se produce como defensa ante una amenaza y puede ser muy positivo, pero si se da de forma continua será uno de los factores que además de bajar nuestras defensas biológicas, acabará desgastando nuestros niveles de energía! Aprende a como gestionar tu estrés.
6) Gestiona las tareas inacabadas: gran parte de las veces el estrés que consume nuestra energía se produce cuando tenemos tareas importantes por hacer y sabemos que no les estamos prestando el cuidado o el tiempo que deberíamos. Aquí será muy importante priorizar y aunque nos cueste, hacer todo lo posible para terminarlas o por lo menos gestionarlas como creemos que debemos. De esta manera nuestra mente se calmará y no solo ahorraremos energía no sintiendo ese malestar, sino que nos sentiremos mejor con nosotros mismos y mejoraremos también nuestra autoestima y capacidad de decisión.
7) Toma el sol: recordemos que la vitamina D regula nuestros niveles de azúcar en sangre, mejora la absorción de calcio, favorece el buen humor y refuerza nuestro sistema inmunológico. Tomar el sol durante 15 minutos diarios nos puede ayudar a mejorar nuestros niveles de energía de forma directa, ya que nuestra exposición a esta vitamina nos aportará innumerables beneficios. Recuerda, vitamina D!
8) Visita a tu endocrino: la falta de energía puede deberse también por una desregulación hormonal. Hormonas y componentes biológicos como el cortisol, la testosterona, los andrógenos, la DHEA, la regulación de la glucosa o la acción de la progesterona (entre otros) pueden intervenir directamente en nuestra regulación enérgica. Algunas desregulaciones o fallos puntuales causados tanto por causas internas como externas pueden estar afectando a nuestros niveles de energía. Por ello, visitar a un endocrino puede ser una opción muy recomendable!
9) Gestiona tus pensamientos negativos: los pensamientos negativos pueden ser una gran fuente de pérdida de energía! Cada vez que nos autosaboteamos o no estamos felices con alguno de nuestros atributos, los pensamientos negativos pueden entrar en nuestra vida (y si no sabemos cómo gestionarnos) pueden llegar a convertirse en un indeseado y muy molesto huésped! Si notas que tienes pensamientos negativos recurrentes no tardes en tomar acción, te sentirás mucho más aliviado y enérgico si consigues gestionarlos.
Artículo recomendado: ¿Cómo eliminar mis pensamientos negativos?
Algunos pensamientos negativos pueden ser:
“No hago nada bien”
“Odio mi cuerpo”
“La vida es un sufrimiento”
“Odio esta parte de mí”
“Ojalá fuese otra persona”
“Nunca voy a poder mejorar este aspecto”
“Estoy condenado al fracaso”
“Odio mi trabajo, ojalá estuviese trabajando en otro sitio”
10) Cuida tu dieta: por último pero no por ello menos importante, llevar una dieta saludable hará que nos sintamos fuertes y que contemos con una reservas de energía óptimas. La falta de algunos componentes clave con el hierro o las vitaminas más importantes pueden afectar nuestros niveles de energía. Saber qué alimentos comer y llevar una dieta equilibrada hará que gestionemos las situaciones difíciles de una forma más enfocada y eficiente. Recomendamos comer alimentos que nos ayuden a bajar nuestros niveles de estrés y evitar los alimentos dañinos para nuestro cerebro, ya que estos últimos podrán traernos muchos problemas si los consumimos de forma recurrente.
Ahora que ya sabes las formas de cómo mejorar tu energía es momento de que las pongas en práctica! Si crees que necesitas ayuda para gestionar tus niveles de estrés y que experimentas falta de energía durante este último tiempo, ponte en contacto con uno de nuestros psicoterapeutas online y pide una sesión de valoración gratuita sin compromiso.
Recuerda, todo gran cambio empieza por un pequeño paso.
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