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Foto del escritorRaquel García

4 consejos de una psicóloga para mejorar la convivencia en el COVID-19.

Actualizado: 10 mar 2021



Hola, soy Raquel García, psicóloga experta en el ámbito general sanitario y psicoterapeuta online de Holamente. Y hoy haré de vuestra convivencia un lugar mejor!


En artículos anteriores, mis compañeros e increíbles psicoterapeutas online, han hablado de temas sobre cómo controlar nuestra ansiedad durante nuestro confinamiento. Pero hoy me voy a centrar en una parte de la que nos estamos olvidando estos días, pero que cobra vital importancia en nuestra salud mental, la convivencia.

En estos días de confinamiento, la mayoría os habéis visto obligados a compartir las 24 horas del día con la/s misma/s personas. Hijos, pareja, padres, hermanos. ¿Cuánto tiempo hacia que no compartíais tanto tiempo juntos?. Por eso mismo, os invito a seáis sincerxs con vosotrxs mismxs: en un inicio tal vez os pareció una buena oportunidad (o no) para disfrutar de vuestros seres queridos. Cuando pasan los días empiezan nuevas sensaciones y no muy agradables. Los problemas de comunicación, la pérdida de libertad y autonomía, disminución de contactos sociales y sentimientos propios de inutilidad son también efectos colaterales del confinamiento!. Hemos de tener en cuenta que en nuestra vida diaria todos tenemos un espacio individual que no compartimos con el resto de miembros de la familia: el colegio, universidad, trabajo, ocios varios, etc., por lo tanto, es totalmente lícito que nos supere en ciertos momentos este aumento repentino de tiempo con nuestros familiares. En nuestra vida rutinaria, hay unos momentos marcados del día en el cual nos relacionamos, compartimos experiencias, expresamos opiniones y pensamientos con ellxs. Por eso, en el momento en el que los límites de las actividades individuales y las actividades en familia se difuminan se requiere de un nuevo periodo de adaptación.


En estos momentos las palabras “cada persona es diferente” toman mucho sentido. Es importante ser conscientes de que cada cual tiene un tipo personalidad y na manera de proceder distinta. Cuando varias personas se juntan en un mismo núcleo de convivencia estas maneras distintas de actuar se confrontan y en muchas ocasiones cuesta que pasen de confrontarse a combinarse. Además de los diferentes puntos de vista hay otros factores como la edad, momento personal, nivel de estrés por la situación, entre otros que pueden dar pie a conflictos.

A nadie le gustan las discusiones y menos cuando son con lo seres queridos más cercanos. Esto genera en todos los miembros de la familia sentimientos de culpabilidad, ansiedad y estrés. También puede haber sentimientos de tristeza ante las discusiones y ver cómo repercute en la relación con alguno de nuestros “acompañantes”. Cualquiera de estas emociones cuando son prolongadas en el tiempo y de una intensidad alta empiezan a generar problemas:


  • Efectos físicos como la fatiga, problemas con el sueño (insomnio o sueño excesivo), cambios de apetito (aumento o disminución), tensión o dolor muscular, dolores estomacales, etc.

  • Efectos psicológicos como una visión más pesimista, disminución de la motivación, sensación de pérdida de control e inseguridad, dificultad de concentración, cambios de humor repentinos, etc.



Como solucionar mis problemas de convivencia? 


No te preocupes en exceso, ya que los problemas de convivencia tienden a solucionarse si se toma el camino correcto. Desde mi experiencia como psicoterapeuta experta en la materia, te propongo 4 tips para mejorar tu convivencia y evitar sus consecuencias negativas:


  1. Normaliza tu necesidad de estar a solas: Debemos aceptar que estamos en nuestro pleno derecho de querer pasar momentos con nosotrxs mismxs en esta cuarentena. Esto no solo hará que disminuyan los sentimientos negativos mencionados, sino que también hará que tengamos un momento único y exclusivo para nosotrxs. Esto nos lleva a clarificar nuestra mente, tener la posibilidad de experimentar sensaciones, mirar dentro nuestro, ser creativos, fortalecer la autoconfianza, tomar decisiones, etc.

  2. Expón los sentimientos negativos que te produce: La comunicación es clave para que las personas puedan entenderse, y entonces, empatizar. En el momento en el que compartimos lo que nos sucede es cuando podemos pedir y empezar a aplicar ciertos cambios. Una comunicación asertiva (sincera y respetuosa), con calma y en el momento adecuado pueden hacerlo más sencillo.

  3. Llegar a un pacto: pacta con tus compañeros de confinamiento los momentos conjuntos y los momentos a solas. Es imprescindible que todo el mundo se sienta cómodo y esté de acuerdo con las decisiones tomadas, para que así mejore el ambiente familiar. Todos los miembros de la familia tienen el mismo derecho a opinar y exponer sus necesidades, independientemente de edad o condición.

  4. Toma el tiempo necesario para adaptarte: Puede ser difícil en un principio aplicar las medidas que se hayan pactado, no debemos alarmarnos. Es posible que en un principio se nos olviden los momentos que han pedido de soledad nuestros acompañantes o que estos nos molesten en un momento “privado”. Es recomendable tener paciencia y reajustar los aspectos que aún no nos convenzan del “pacto”.

Una conversación sobre esta necesidad de individualidad puede ahorrarnos problemas a largo plazo. De hecho, es probable que produzca alivio al resto de miembros de la familia por sensaciones similares. Esto no es sinónimo de menospreciar el tiempo compartido o de no querer pasar momentos juntos, sino recordar que somos seres individuales con sus propias necesidades, gustos y emociones. Por lo tanto, llegar a un acuerdo sobre qué momentos se compartirán, o pedir en ciertas ocasiones estar solo no significa que nuestro amor y afecto hayan desaparecido, sino que racionado se disfruta mucho más.


Si crees que los conflictos de convivencia están afectando a tu bienestar directamente y te gustaría solventarlos, contacta con nuestros psicólogos online y ellos te darán las pautas específicas para solventar tu caso.

 

Artículo escrito por: Raquel García, un psicoterapeuta con gran compromiso, implicada y defensora de la importancia que cobra la salud mental en nuestras vidas!. Y además psicóloga online y psicoterapeuta online del increíble equipo de Holamente. Mejoramos vidas.


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